ESCRITO DIRIGIDO A:

ESCRITO DIRIGIDO A:
Los salva patrias, los del honor a las banderas, los de en nombre de Dios, los de la información que vende, los de la memoria histórica y todos aquellos que toman el sentimiento de los pueblos y sus gentes como suyos para sus intereses personales.

EXPONGO:

Como exposición a mi suplica, sus señorías, y el autor del libro “Territorio Comanche” Arturo Pérez Reverte me permitirán para que sirvan de materia meditativa, el uso de unos párrafos sobre la guerra de los Balcanes, esa matanza que ha pasado como si se hubiese desarrollado en otra galaxia y entre extraterrestres.
“Cuando alguna bomba caía cerca, iban corriendo y grababan la humareda, las llamas, los escombros. Los voluntarios sacaban a las victimas. A Márquez no le gustaba que Barlés ayudase a los equipos de rescate porque se metía en el cuadro y estropeaba el plano.
A Márquez las lágrimas no le dejaban enfocar bien, por eso no lloraba nunca cuando sacaban de los escombros niños con la cabeza aplastada, aunque después pasara horas sentado en un rincón, sin abrir la boca”.
“Barlés lo sabía muy bien: el hecho de que un artillero serbio, por ejemplo, disparase la granada de mortero PPK-S1A en lugar de la PPK-SBB contra la cola del pan en Sarajevo podía suponer la diferencia entre que Mirjan, o Liljiana, vivieran, muriesen, recibieran heridas leves o quedasen mutilados para toda la vida. Y la existencia o disponibilidad de la PPK-S1A o la PPK-SBB dependían menos de las ganas del artillero serbio que de los cálculos estadísticos realizados por los citados Mortimer o Manolo mientras, entre café y café, intentaban llevarse al huerto a la secretaria. La bala retozona 5,56, esa misma que hace zigzag y en vez de salir por ahí sale por allá o hace estallar el hígado, se comporta así porque un brillante ingeniero, hombre pacifico donde los haya, quizá católico practicante, aficionado a Mozart y a la jardinería, paso muchas horas estudiando el asunto. Tal vez le dio nombre -Bala Louise, Pequeña Eusebia- porque el día que se le ocurrió el invento era el cumpleaños de su mujer, o su hija. Después terminados los planos con la conciencia tranquila y la satisfacción del deber cumplido, el asesino de manos limpias apagó la luz en la mesa de proyectos y se fue a Disneylandia con la familia”.
Sin más exposición.
SUPLICO

A sus señorías los salva patrias, los del honor a las banderas, los de en nombre de Dios, los de la información que vende, los de la memoria histórica y todos aquellos que toman el sentimiento de los pueblos y sus gentes como suyos para sus intereses personales, que nos dejen en paz que:
- Mi patria es el mundo.
- Mi honor a la bandera no es ser humillado o sometido.
- No creo en los hombres y mujeres que matan en nombre de Dios.
- No quiero medios de comunicación que usan el dolor de las gentes para sus beneficios.
- Respeto la memoria histórica para no cometer errores futuros, pero no acepto a los que la usan para levantar heridas.

Para que conste en Mislata a 10 de mayo de 2006, lo firma
Pascual Pérez.