UN PAIS EN BLANCO Y NEGRO.

Este país durante la dictadura vivió su momento negro en aspectos como libertades, desarrollo cultural, medios e instalaciones para conseguir los niveles de las sociedades europeas. La libertad es evidente que tienen que ver con el pago de impuestos. El pago de impuestos sostenibles, lógicos y bien gestionados suponen sociedades justas. Durante la dictadura no se hablaba de impuestos, de IRPF, IVA, etc, etc, la sociedad vivía en precario y prácticamente de la caridad del gobierno y los señoritos.

Una vez llegada la democracia pensamos que pasaríamos del negro al blanco, o en el peor de los casos al gris, pero el tiempo nos ha vuelto al negro de la dictadura, por ejemplo: las tarjetas black, el que un partido tenga una caja “B” o se lucre de los ERES, que nos digan que debemos pagar impuestos para ser solidarios y quien te lo dice evade capital e impuestos en paraísos fiscales, que nos digan que no se ha rescatado a la banca pero han dejado vacía la caja de las pensiones y encima te dice que “el culpable eres tú por vivir por encima de tus posibilidades”. No se puede entender y menos consentir que un Ministro de Hacienda efectúe una amnistía fiscal “ilegal” justificándola con la frase “sólo era ir a pescar pececitos en el mar, y por eso no se puede considerar ilegal”, este ministro no puede permanecer en el gobierno ni un segundo.  

La falta de solidaridad como consecuencia de no pagar los impuestos por desgracia en nuestro país es algo generalizado. ¿Quién no ha pagado una obra es su casa, o trabajos a autónomos sin pagar el IVA?. Este país aún no ha superado el negro de la dictadura, y es que la realidad política a nivel de impuesto no ha cambiado mucho. Cuando pagas una factura a un autónomo el comentario generalizado es: “¡Para que pagar impuestos si eso supone un problema para mí, y, además, los partidos políticos no los pagan terminando el dinero en paraísos fiscales!”. Mi respuesta es: “Si no pagamos impuestos no tendremos pensión de jubilación, no tendremos una sanidad y educación de calidad, no tendremos bienes y servicios y retrocederemos a regímenes dictatoriales donde los únicos que viven bien son las clases sociales altas y los adeptos al poder. La solución es quitar a los que nos mal gobiernan por mentirosos, organización criminal, hacer políticas en beneficio de multinacionales y los intereses del neoliberalismo más radical”.

Yo soy realista y sé que pasar del negro al blanco es muy difícil, pero lo lógico es por lo menos pasar al gris o mejor al resto de colores.